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Número 19 Vol. 1 (2018)
INTRODUCCIÓN
inductivo (ICP ) que actúa simultáneamente como
Procedimiento experimental
El experimento se realizó en la Indus-
tria orícola White River Roses cantón
Penipe – Ecuador (1.6 °S, 78.5 °W). Se
tomaron muestras compuestas en cuatro
diferentes sitios de la cadena de irriga-
ción: entrada de agua del río Blanco (A),
entrada de agua del canal de riego (B),
reservorio (C) y red de distribución (D).
Se realizaron tres muestreos en diferen-
tes fechas. El agua del río y el agua del
canal ingresan al reservorio a través de
tubería, por lo que en estos dos puntos se
tomaron las muestras en el agua corrien-
te. El agua del reservorio es supercial
y la muestra se tomó sumergiendo el re-
cipiente en un lugar alejado de la orilla.
El agua del sistema de distribución de
riego proviene del reservorio a través de
tubería y su ujo es controlado mediante
válvulas. El muestreo en este punto se
realizó abriendo la válvula y dejando co-
Revista Científica
ISSN 2477-9105
MATERIALES Y MÉTODOS
ma sensibilidad,
con
límites
de
detección ,
para
algunos
elementos ,
inferiores
a
0,1
partes
por
trillón
(0,1
pg/mL)
y
que
se
determinan
con
LOD=c/(I
L+T
-
I
T
)*I
T
*(3/100)
(15).
El
objetivo
de
esta
investigación
fue
determinar
cuantitativamente
por
ICP,
el
grado
de
contaminación
por
metales
pesados
de
las
aguas
de
riego
de
la
Industria
Florícola
White
River
Roses.
atomizador y fuente de excitación (12).
El método de Plasma de Acoplamiento
Inductivo (ICP) es altamente sensible
para la determinación de metales pesa-
dos que permite detectar cualitativa y
cuantitativamente más de 70 elementos
(13,14). En las técnicas de absorción
atómica, la absorción o emisión de luz
se aplica a átomos aislados , lo cual e-
vita la complejidad de los enlaces mo-
leculares (14 ). Cuando se acopla el
ICP con el espectrómetro de masas se
obtiene un sistema de análisis multi -
elemental de elevadísi
El agua es un recurso natural fundamental para el cultivo
de plantas orícolas. La calidad del agua de riego tiene
un impacto considerable sobre el crecimiento exitoso y
la productividad de las plantas (1,2) y su conocimiento
permite realizar los cambios necesarios para garantizar la
productividad a largo plazo (1,3).
Actualmente, la mayor preocupación sobre la seguri-
dad del agua es la potencial presencia de contaminantes
químicos, procedentes de fuentes industriales, agrícolas
y urbanas (4). Los metales pesados son elementos quí-
micos metálicos que tienen una densidad relativamente
alta y son tóxicos o venenosos a bajas concentraciones
(5), provocando problemas de toxicidad en los organis-
mos vivos debido a que son bioacumulables (6). Ele-
mentos como níquel, cromo, cadmio, plomo, arsénico,
selenio y mercurio, aún en pequeñas proporciones son
potencialmente tóxicos. Una de las principales causas de
la contaminación del suelo con metales pesados (plomo,
cadmio, cromo, zinc, cobre, níquel, mercurio, mangane-
so, selenio y arsénico, entre otros) es el riego con agua
de cauces y aguas residuales contaminadas (7,8). En las
plantas el mayor riesgo de los metales pesados radica en
que pueden acumularse en las partes comestibles de los
cultivos dedicados al consumo humano o para alimento
de animales. La capacidad de absorción de las plantas
con respecto a metales pesados es variable, lo que abre
la posibilidad de adaptar la elección de cultivos según el
grado y tipo de contaminación. La absorción de metales
pesados en las plantas (especialmente cadmio y plomo)
también varía según el pH del suelo (9). Las plantas or-
namentales se han propuesto para crecimiento en suelos
contaminados con metales pesados, y también para su
uso en toremediación, determinándose que la produc-
ción de biomasa se reduce signicativamente en los sue-
los enriquecidos con metales pesados que se concentran
más en las raíces que en la parte aérea de las plantas (10).
Estudios realizados en la industria orícola, muestran
que los residuos de rosas tienen importantes cantidades
de elementos potencialmente tóxicos: Ni, Cr, Pb, As y
Se (11). Esto indicaría que este tipo de plantas podrían
utilizarse como hiperacumuladores.
La espectroscopía de emisión atómica (AES) es una téc-
nica de análisis simultáneo multielemental que permite
detectar casi todos los elementos de la tabla periódica
(12). El plasma es un gas ionizado que se induce en una
corriente de ujo de argón. Para las emisiones atómicas
comúnmente se emplea la antorcha de plasma de acopla-
miento